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jueves, 6 de octubre de 2011

LECTURA 01 ACTITUD EMPRENDEDORA


Los parques tecnológicos y el negocio de la tecnología 3/3
The technological parks and the technology business
Germán Crespo


¿Cuál es el negocio?

La actividad de los PT en Venezuela va más allá de la administración de un negocio inmobiliario con los "tenant", de hecho en Tecnoparque Barquisimeto esta actividad no se realiza. Son actividades fundamentales: la atención de emprendedores, el manejo de la propiedad intelectual, la participación en joint ventures, la incubación de empresas, la formación y capacitación gerencial y la transferencia de tecnología.

Todo ello enmarcado dentro de un fin social y de lucro, cuya utilidad es reinvertida en las unidades de investigación de las Universidades relacionadas y en el desarrollo permanente de los parques. Para que estos procesos sean exitosos debe identificarse: ¿Cuál es el negocio?.

Por otra parte, los mecanismos de evaluación de las "empresas innovadoras", no consideran las variables reales que orientan hacia resultados exitosos en materia de desarrollo de tecnología y su transferencia. Empresas que han recibido la mayor calificación en estas evaluaciones y cuentan con excelentes innovadores, han fracasado en la implementación de nuevas tecnologías desarrolladas por ellas mismas, al no responder la pregunta básica: ¿cuál es el negocio?. (Crespo ( c ) , 1998).

Es así, como los estudios de mercado para nuevos productos y/o procesos, desde el punto de vista de los PT como actores, deben responder a la pregunta cuál es el negocio?. Una innovación o un nuevo desarrollo tecnológico, puede ser explotado comercialmente y transferida su tecnología de muchas formas: creando o incubando una nueva empresa,patentando y licenciando tal patente, con asociaciones estratégicas, o limitándose al negocio inmobiliario. La opción a tomar la establece la respuesta a la pregunta mágica: cuál es el negocio?. 

Logros obtenidos por los PT y futuro inmediato
Con menos de cinco años de actividades de los PTs y con especial énfasis en las áreas de informática, telecomunicaciones, biotecnología, salud, alimentación, nuevos materiales, software y hardware, se cuenta con más de 21 empresas incubadas, 32 en proceso de incubación, más de 150 casos de aplicación y transferencia de nuevas tecnologías para las PYMES, más de 30000 metros cuadrados de nuevas edificaciones para 23 empresas instaladas, 5 patentes aprobadas y 26 en trámites nacionales e internacionales de aprobación y un área disponible de 145 hectáreas (con otras 140 hectáreas a futuro) para nuevos "tenants".

Al mostrar resultados concretos y demostrar que los PT son una vía factible para el desarrollo de nuevos negocios basados en la innovación y en la tecnología, con beneficios para las PYMES y las universidades, donde germinan las ideas de los emprendedores, que a su vez se convierten en generadores de nuevos empleos al incubar empresas no tradicionales, se está dando un cambio importante a los mecanismos comerciales tradicionales, con mayor incorporación a la globalización, orientando la investigación que se realiza y modificando los patrones de formación de los recursos humanos.
La etapa inmediata a seguir deberá abordar el trabajo en redes nacionales, la multiplicación de los negocios tecnológicos entre empresas de los PT y la incorporación a las redes internacionales. La tecnología de la información es y será la herramienta más poderosa para las nuevas modalidades de negocios (Colmenares, 1997), (Taylor y Fórmica, 1998).
La consolidación de los PT en Venezuela tendrá la mayor parte de su soporte en "La Actitud Emprendedora".


La actitud emprendedora

En los últimos años, ha tomado relevancia el concepto de "emprendedor" (enterprising para algunos o entrepreneur para otros) y se tiene la creencia de ser algo novedoso. El término tal vez lo sea, pero lo que encierra es tan antiguo como la humanidad misma.
La definición de emprendedor lleva en sí una sensación de optimismo, proactividad y desafío. Un emprendedor es aquél capaz de acometer un proyecto que no es aceptado (y muchas veces no entendido) por la mayoría de las personas de su entorno, es un individuo que supera los obstáculos que se le presentan sin distraer energía en aquello que no apunta hacia su meta y sin temor alguno al fracaso. No pierde tiempo hablando de los errores sino que los convierte en experiencia.

El emprendedor se aprovecha de las situaciones de crisis y prospera en ambientes de depresión anímica; no se queja, ni critica las acciones de otros ni lanza opiniones sobre cualquier tema sin un aporte valioso para lograr sus metas. Ve una solución en cada problema y no un problema en cada solución.

Un emprendedor es aquél capaz de convertir una idea en negocio, que mantiene un ritmo constante de crecimiento y creación, que hasta se podría decir, sin límite. La anterior definición no debe confundirse con la de empresario, quien es el que gerencia un negocio.
La actitud emprendedora no se limita a los individuos que buscan un beneficio económico por actividades comerciales. La encontramos en los centros de investigación, universidades y en aquellas entidades que obtienen de sus investigaciones resultados, sean productos específicos, nuevos conocimientos o procesos, que son susceptibles de ser transformados en negocios. Esta actitud también se encuentra en los gestores de tecnología quienes, sin ser los creadores de las innovaciones ni, posiblemente, usuarios directos de tales productos, logran la milagrosa transformación de esas ideas en negocios.

La formación de nuevos emprendedores debe ser una tarea permanente, no debe seguir formándose profesionales para el empleo sino para el trabajo; debe cambiarse el esquema de impartir conocimientos por el enseñar a gerenciar el conocimiento y, como complemento indispensable, manejar la información, donde la actitud emprendedora es la meta formativa a lograr.
Desde tiempos remotos se ha hablado de transferencia de tecnología y, aunque son muchos los resultados logrados en Universidades y Centros de Investigación del país, no ha habido una actitud emprendedora que elimine, o por lo menos minimice, el síndrome del 80%. 

El éxito de una actitud emprendedora, materializado en logros concretos, está en nosotros mismos. ASOPARTEC es un buen ejemplo donde se mantiene esta actitud, que se ha reflejado en una creciente incidencia de resultados y una búsqueda constante de nuevas metas a alcanzar.

Conclusiones
La principal conclusión derivada de la experiencia de los PTs en Venezuela es que, a pesar de no haber tenido las condiciones adecuadas del entorno que promuevan y faciliten su labor, han logrado importantes resultados que demuestran que es una vía factible y exitosa para el desarrollo de cualquier región o país.
Los PTs, además de ser un excelente negocio de por sí y dentro de las funciones básicas y necesidades a satisfacer, están llamados a convertirse en verdaderos Centros de Transferencia de Tecnología, inexistentes en el país actualmente, Centros de Formación de Emprendedores y Nuevos Negocios basados en la Tecnología y, lo de más avanzada, en orientadores de la Investigación del país en función de sus requerimientos.

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